La preparación de la novia – Semana 2
La edificación de la novia
Versículos relacionados
Génesis 2:18, 20
18 Después dijo Jehová Dios: No es bueno que el hombre esté solo; haré ayuda idónea para él.
20 Y el hombre puso nombre a todo ganado y a las aves del cielo y a todo animal del campo, mas para Adán no se halló ayuda idónea.
Romanos 5:14, 17
14 No obstante, reinó la muerte desde Adán hasta Moisés, aun sobre los que no pecaron a la manera de la transgresión de Adán, el cual es tipo del que había de venir.
17 Pues si, por el delito de uno solo, reinó la muerte por aquel uno, mucho más reinarán en vida por uno solo, Jesucristo, los que reciben la abundancia de la gracia y del don de la justicia.
Romanos 16:20
20 El Dios de paz aplastará en breve a Satanás bajo vuestros pies. La gracia de nuestro Señor Jesús sea con vosotros.
Juan 3:29
29 El que tiene la novia, es el novio; mas el amigo del novio, que está allí y le oye, se goza grandemente de la voz del novio; así pues, éste mi gozo se ha colmado.
2 Corintios 11:2
2 Porque os celo con celo de Dios; pues os he desposado con un solo esposo, para presentaros como una virgen pura a Cristo.
Efesios 1:22-23
22 y sometió todas las cosas bajo Sus pies, y lo dio por Cabeza sobre todas las cosas a la iglesia,
23 la cual es Su Cuerpo, la plenitud de Aquel que todo lo llena en todo.
Lectura relacionada
Dios deseaba tener a Adán y a Eva [cfr. Gn. 2:18]. Su propósito consiste en tener a un Cristo victorioso más una iglesia victoriosa, un Cristo que venció la obra del diablo más una iglesia que ha derribado la obra del diablo. Su propósito es tener un Cristo que gobierne y una iglesia que gobierne. Esto es lo que Dios planeó para Su propio placer, y Él lo ha hecho para Su propia satisfacción … Dios deseaba tener a Cristo, y Dios también deseaba tener una iglesia que fuese exactamente como Cristo. Dios no deseaba solamente que Cristo tuviese dominio, sino que Él quiere que la iglesia también tenga dominio. Dios permite que el diablo esté sobre la tierra porque Él dijo que Cristo y la iglesia “ejerzan dominio” [1:26]. Dios se propuso que la iglesia, como complemento de Cristo, participara en la victoria sobre Satanás. Si la iglesia no corresponde a Cristo, no se cumplirá el propósito de Dios. En la batalla, Cristo necesita una ayuda idónea, y aun en gloria, también necesita una ayuda idónea. Dios exige que la iglesia sea igual que Cristo en cada aspecto. Dios desea que Cristo tenga una ayuda idónea. (La iglesia gloriosa, págs. 26-27)
A pesar de que el hombre era perfecto, no estaba completo. Por ejemplo, una cabeza humana es perfecta, pero sin el cuerpo está incompleta … A pesar de ser perfecto, [una persona] necesita un complemento que lo complete … Un hombre y una esposa son como las dos mitades de una sandía, y juntos constituyen una unidad completa. Ésta es la razón por la cual suelo aconsejar a los jóvenes que se casen. Si usted no está casado, está incompleto, por muy perfecto que sea. Por consiguiente, cuando Dios miró a Adán, fue como si le dijera: “Adán, eres perfecto, pero eres solamente la mitad de una unidad. Estás demasiado solitario. Te haré un complemento, alguien que te corresponda”.
El hombre tipifica a Dios, el verdadero Marido universal. Dios estaba solo antes de hacer al hombre apropiado. No era bueno que Dios estuviera solo. A pesar de ser absoluta y eternamente perfecto, Dios no está completo. Decir que Dios es imperfecto es una blasfemia. Nuestro Dios es eternamente perfecto. No obstante, sin la iglesia Él está incompleto. Sin la iglesia, Él es como un marido sin esposa o como una cabeza sin cuerpo. Por consiguiente, cuando Dios dijo que no era bueno que Adán estuviese solo, daba a entender que Él mismo estaba incompleto y que no era bueno que Él estuviera solo. Adán necesitaba una esposa, y eso tipifica y describe la necesidad que tiene Dios de tener un complemento. Si vemos esto, se aclararán todos los aspectos de Génesis 2.
Dios formó de la tierra todo animal del campo y toda ave de los cielos y los trajo a Adán (Gn. 2:19). Cuando Dios trajo un caballo a Adán, quizás éste haya dicho: “Es un caballo; este animal nunca me corresponderá porque tiene cuatro patas, mientras que yo tengo dos piernas”. Cuando Dios puso una vaca delante de Adán, tal vez Adán dijo: “Es una vaca; tiene dos cuernos. No se parece a mí y no puede ser mi complemento”. Dios presentó todos los animales a Adán, y Adán dio nombre a todo el ganado, a todas las aves del cielo y a todos los animales del campo, pero no encontró entre ellos ningún complemento para sí (Gn. 2:20), ninguno que le correspondiera a él. Aunque Adán, con sabiduría, les dio nombre a todas las criaturas, él parecía decir: “Todas ellas están lejos de mí. No se parecen a mí. ¿Cómo podría alguna de ellas ser mi complemento?”. En cierto sentido, Adán, después de dar un nombre a todas las criaturas, quedó desilusionado. En toda la creación no pudo encontrar a nadie que le correspondiera, que lo complementara. Pero Dios sabía exactamente lo que hacía. (Estudio-vida de Génesis, págs. 224-225)
Lectura adicional: La línea central de la revelación divina, cap. 7; La iglesia gloriosa, caps. 2—3