LA VIDA CRISTIANA – Semana 3
El significado intrínseco y la revelación
del ungüento compuesto como aceite de la santa unción:
un tipo completo del Espíritu compuesto
y todo-inclusivo del Dios Triuno procesado
Versículos relacionados
1 Juan 2:20, 27
20 Pero vosotros tenéis la unción del Santo, y todos vosotros tenéis conocimiento.
27 Y en cuanto a vosotros, la unción que vosotros recibisteis de Él permanece en vosotros, y no tenéis necesidad de que nadie os enseñe; pero como Su unción os enseña todas las cosas, y es verdadera, y no es mentira, así como ella os ha enseñado, permaneced en Él.
Mateo 25:2
2 Cinco de ellas eran insensatas y cinco prudentes.
Génesis 6:15 (nota 2)
15 De esta manera la harás: de trescientos codos la longitud del arca, de cincuenta codos su anchura y de treinta codos su altura.
1 Pedro 1:2
2 escogidos según la presciencia de Dios Padre en santificación del Espíritu, para la obediencia y la aspersión de la sangre de Jesucristo: Gracia y paz os sean multiplicadas.
1 Corintios 6:11
11 Y esto erais algunos; mas ya habéis sido lavados, ya habéis sido santificados, ya habéis sido justificados en el nombre del Señor Jesucristo, y en el Espíritu de nuestro Dios.
Romanos 15:16
16 para ser ministro de Cristo Jesús a los gentiles, un sacerdote que labora, sacerdote del evangelio de Dios, para que los gentiles sean ofrenda agradable, santificada por el Espíritu Santo.
Juan 20:22
22 Y habiendo dicho esto, sopló en ellos, y les dijo: Recibid el Espíritu Santo.
Lectura relacionada
Como ungido de Dios, Cristo pasó por Su nacimiento, vivir humano, crucifixión, resurrección y ascensión … Hemos visto que el espíritu de una sustancia es el extracto de la misma. Podemos aplicar este principio al Espíritu de Cristo y decir que los extractos del nacimiento, vivir, muerte, resurrección y ascensión de Cristo constituyen ahora todos los elementos del Espíritu de Cristo. Por tanto, en este único Espíritu tenemos la eficacia del nacimiento, vivir, muerte, resurrección y ascensión de Cristo.
Cuando andamos conforme al Espíritu, tenemos la encarnación de Cristo y Su vivir humano. No tenemos meramente una imitación de la manera en que vivió Cristo. Además, también tenemos Su muerte, resurrección y ascensión. (Estudio-vida de Éxodo, págs. 1658)
Recibir la unción equivale a recibir la pintura divina … En nuestra experiencia del Espíritu necesitamos ser “pintados” una y otra vez. A la larga podremos recibir centenares de capas.
En la actualidad Dios nos enseña silenciosamente principalmente por medio de la unción. Por ejemplo, usted puede preguntarle algo al Señor, y Él le enseñará acerca de ello al ungirlo.
En 1 Juan 2 vemos que la unción que está en nuestro interior nos enseña todas las cosas. A menudo sabemos que estamos equivocados. Nadie necesita decirnos, pero el mover de la unción interior nos enseña que estamos equivocados. Creo que todos hemos experimentado en cierto grado esta enseñanza de la unción.
Los quinientos siclos de mirra representan una unidad de plena responsabilidad. En la Biblia, el número cinco simboliza la responsabilidad. Un buen ejemplo de esto sería la mano. Nuestra mano tiene cuatro dedos y un pulgar; debido a esto, la mano puede hacer muchas cosas y llevar responsabilidades.
El número cuatro representa la criatura, y el número uno representa a Dios. Por tanto, el número cinco representa a Dios añadido al hombre a fin de darnos la capacidad de llevar responsabilidad.
En la Biblia hay ejemplos claros que muestran el hecho de que el número cinco es el número de responsabilidad. Los Diez Mandamientos fueron escritos en dos tablas, con cinco mandamientos en cada una. Las diez vírgenes de Mateo 25 fueron divididas en dos grupos de cinco cada uno. En estos dos casos, el número cinco representa responsabilidad. Los quinientos siclos de mirra se componen de cien veces cinco, lo cual representa una unidad completa de plena responsabilidad.
Según Éxodo 30:23, la medida de la canela era “la mitad, doscientos cincuenta siclos; de cálamo aromático, doscientos cincuenta siclos”. Doscientos cincuenta siclos representan media unidad de plena responsabilidad. Los doscientos cincuenta siclos de canela junto con los doscientos cincuenta siclos de cálamo forman una unidad completa y representan que el segundo de la Trinidad divina fue partido por medio de la muerte. No es casualidad que con respecto a las especias, hay tres unidades completas y la unidad del medio está dividida en dos. Dios lo dispuso así para indicar que Su hijo sería partido en la cruz.
El versículo 24 dice: “De casia, quinientos siclos, conforme al siclo del santuario, y un hin de aceite de oliva”. Los quinientos siclos de casia representan también una unidad de plena responsabilidad.
Las tres unidades de quinientos siclos cada una, en cuatro especias, representan al Dios Triuno en resurrección mezclado con la humanidad para llevar la plena responsabilidad. Puedo testificar que en el ministerio de la Palabra, el Dios Triuno en resurrección se mezcla con el orador para llevar la responsabilidad de ministrar la Palabra a Su pueblo. (Estudio-vida de Éxodo, págs. 1646-1647)
Lectura adicional: Estudio-vida de Éxodo, mensaje 159