La preparación de la novia – Semana 4
La hermosura de la novia
Versículos relacionados
Isaías 28:5
5 En aquel día Jehová de los ejércitos / será por corona de gloria y diadema de hermosura al remanente de Su pueblo,
Isaías 43:7
7 a todo el que es llamado por Mi nombre, / a quien he creado, formado y hecho para gloria Mía.
Salmos 27:4
4 Una cosa he pedido a Jehová; / ésta buscaré: / morar en la casa de Jehová / todos los días de mi vida, / para contemplar la hermosura de Jehová / y para inquirir en Su templo.
Romanos 6:19, 22
19 Hablo en términos humanos, por la debilidad de vuestra carne; que así como presentasteis vuestros miembros como esclavos a la inmundicia y a la iniquidad para iniquidad, así ahora presentad vuestros miembros como esclavos a la justicia para santificación.
22 Mas ahora que habéis sido libertados del pecado y hechos esclavos de Dios, tenéis vuestro fruto para santificación, y como fin, la vida eterna.
Efesios 3:21
21 a Él sea gloria en la iglesia y en Cristo Jesús, en todas las generaciones por los siglos de los siglos. Amén.
Isaías 60:1, 7, 9, 13, 19
1 ¡Levántate! ¡Resplandece! Porque ha venido tu luz; / y la gloria de Jehová ha amanecido sobre ti.
7 Todos los rebaños de Cedar serán reunidos para ti; / los carneros de Nebaiot te ministrarán; / subirán como ofrendas aceptas sobre Mi altar, / y embelleceré la casa de Mi hermosura.
9 Ciertamente a Mí me esperarán las costas; / y las naves de Tarsis vendrán primero, / para traer a tus hijos de lejos, / su plata y su oro con ellos, / al nombre de Jehová tu Dios, / y al Santo de Israel, porque Él te ha embellecido.
13 La gloria del Líbano vendrá a ti, / el abeto, el pino y el boj juntamente, / para embellecer el lugar de Mi santuario; / y Yo haré glorioso el lugar de Mis pies.
19 El sol nunca más te servirá de luz para el día / ni el resplandor de la luna te alumbrará, / sino que Jehová te será por luz eterna, / y el Dios tuyo será tu hermosura.
Isaías 62:3
3 También serás corona de hermosura en la mano de Jehová, / y turbante real en la palma de tu Dios.
Lectura relacionada
En Isaías 28:5 Cristo es revelado como corona de gloria y como diadema de hermosura. Debemos considerar la diferencia que existe entre una corona y una diadema. Podríamos pensar que ambas expresiones se refieren a una misma cosa, pero estos ítems no están en aposición en el versículo 5. Están separados por una conjunción: corona de gloria y diadema de hermosura. Ésta es la manera maravillosa en que Isaías escribió este versículo. Una corona es como un sombrero o turbante, mientras que una diadema viene a ser la parte más hermosa y gloriosa de una corona. Es la cinta que ciñe la cabeza. En términos generales, una corona representa gloria, pero la belleza de dicha corona se halla en su diadema, la cual suele estar llena de joyas y piedras preciosas. La diadema es la hermosura de la corona gloriosa.
Cristo será por corona de gloria y diadema de hermosura al remanente de Israel, el pueblo escogido de Dios, en la era de la restauración, después que hayan concluido las medidas disciplinarias que Él tomará con respecto a Su pueblo. Cristo será la glorificación del pueblo escogido de Dios. La gloria y la hermosura son dos cosas distintas. Algo podría ser muy glorioso, pero no tan hermoso. Cristo será por gloria y hermosura a Su pueblo elegido. (Estudio-vida de Isaías, págs. 318-319)
Debemos recordar que la era de la gracia es una miniatura y un anticipo de la era venidera de restauración. Hoy en día disfrutamos un anticipo de Cristo como nuestra corona y diadema.
Lamentablemente, a muchos no les parece que sea glorioso decir a los demás que son cristianos. Algunos cristianos pueden hablar sobre otras personas y asuntos de manera gloriosa, pero cuando abordan el tema referente a Cristo, se sienten avergonzados. Eso no está bien. Cuando hablemos sobre Cristo y cuando le digamos a la gente que somos cristianos, debemos considerar que Cristo es nuestra corona y diadema, nuestra gloria y hermosura.
Yo experimenté a Cristo de este modo hace unos cincuenta años cuando Japón invadió China y fui encarcelado por el ejército japonés. Por un lado, ellos me humillaron, me juzgaron y me torturaron; por otro, me respetaban y me estimaban porque me conducía como cristiano. Pablo dijo en el libro de Filipenses, mientras estaba encarcelado en Roma, que su anhelo y esperanza era que en nada fuese avergonzado, sino que magnificase a Cristo (1:20). Pablo magnificó a Cristo a tal grado que incluso algunos miembros de la casa de César se hicieron creyentes de Cristo (4:22). Según la experiencia de Pablo, él poseía a Cristo como su corona con una diadema. Debemos sentirnos gloriosos de que somos cristianos. Cuando estamos derrotados, nos sentimos avergonzados, pero cuando nos arrepentimos y recibimos la impartición de Cristo de manera fresca, nos sentimos gloriosos. (Estudio-vida de Isaías, págs. 319-320)
Las manchas y las arrugas no afectan la función de la iglesia, pero sí deterioran la hermosura de la iglesia. Lo primero que busca el hombre en una novia no es su habilidad, sino su hermosura. La iglesia como novia de Cristo también debe ser hermosa … Aunque ejerzamos nuestra función apropiadamente y tengamos un vivir diario excelente conforme al espíritu de la mente, es posible que ante el Señor no seamos hermosos debido a nuestras manchas y arrugas. Después que Pablo abarca exhaustivamente el tema de la iglesia en los capítulos del 1 al 4 de Efesios, en el capítulo 5 habla sobre la iglesia como novia. En este capítulo no dice nada respecto a la creación de la iglesia, el crecimiento de la iglesia o el vivir diario de la iglesia; él habla más bien de la hermosura de la iglesia. Cuando Cristo se presente la iglesia a Sí mismo, la iglesia no será un hombre fuerte; ella será una novia hermosa. Cristo es el hombre universal, y este hombre universal necesita que la iglesia sea Su novia que lo complementa. Para que la iglesia sea la novia de Cristo, ella debe ser hermosa y no tener manchas ni arrugas. (Estudio-vida de Efesios, pág. 805)
Lectura adicional: Estudio-vida de Isaías, mensaje 43; Los grupos vitales, 2.a ed., cap. 8