Los capítulos del 5 al 8 de Romanos:
el núcleo de la Biblia – Semana 2
El resultado de nuestra justificación:
el pleno disfrute que tenemos de Dios
en Cristo como nuestra vida
Versículos relacionados
Romanos 3:24, 26
24 siendo justificados gratuitamente por Su gracia, mediante la redención que es en Cristo Jesús,
26 con la mira de demostrar Su justicia en este tiempo, a fin de que Él sea justo, y el que justifica al que es de la fe de Jesús.
Hechos 10:43
43 De Él dan testimonio todos los profetas, de que por Su nombre, todos los que en Él creen recibirán perdón de pecados.
Isaías 61:10
10 En gran manera me regocijaré en Jehová, / mi alma exultará en mi Dios, / porque me ha vestido con vestiduras de salvación, / me ha envuelto con manto de justicia; / soy como el novio que lleva el tocado del sacerdote, / y como la novia que se adorna con sus joyas.
Lucas 15:22
22 Pero el padre dijo a sus esclavos: Sacad pronto el mejor vestido, y vestidle; y poned un anillo en su mano, y sandalias en sus pies.
Jeremías 23:6
6 En Sus días será salvo Judá, / e Israel habitará seguro; / y éste es Su nombre con el cual será llamado: / Jehová, justicia nuestra.
Zacarías 3:4
4 Respondió y habló a los que estaban delante de Él, diciendo: Quitadle las vestiduras asquerosas. Luego le dijo: Mira que he quitado de ti tu iniquidad, y te he hecho vestir de ropas majestuosas.
Lectura relacionada
La justificación es la acción de Dios por la cual Él nos aprueba conforme a Su norma de justicia. La norma es Su justicia, no la nuestra … ¿Cuán elevada es la justicia de Dios? ¡Es ilimitada! ¿Podría Dios aprobarnos basándose en nuestra propia justicia? Es imposible. Es posible que uno esté bien con todos —con sus padres, sus hijos y sus amigos—, pero esa justicia jamás lo justificará delante de Dios. Uno podrá justificarse conforme a su propia norma de justicia, pero eso no lo capacitará para ser justificado por Dios conforme a Su norma. Necesitamos la justificación por la fe. La justificación por la fe delante de Dios significa ser aprobados por Dios conforme a la norma de Su justicia.
¿Cómo puede Dios hacer esto? Lo puede hacer porque nuestra justificación está basada en la redención de Cristo. Somos justificados cuando la redención de Cristo es aplicada a nosotros. Si no hubiera tal redención, sería imposible que fuéramos justificados por Dios. La redención es la base de la justificación. (Estudio-vida de Romanos, pág. 53)
A muchos estudiantes de la Biblia les es muy difícil entender la frase la fe de Jesucristo (Ro. 3:22). Unos dicen que esto se refiere a nuestra acción de creer en Jesucristo. Otros argumentan que se refiere a la fe de Jesús, que Su fe llega a ser nuestra. Yo lo diría de la siguiente manera: la genuina acción de creer es creer en el Señor Jesús por Su fe. Creemos en Jesucristo por Su fe, pues nosotros no tenemos fe propia. Jesús es el Autor y Perfeccionador de nuestra fe (He. 12:2) … La justicia de Dios se manifiesta aparte de la ley por medio de nuestra acción de creer en Jesucristo por Su fe. Creemos en Cristo por Su fe, no por la nuestra. Cristo es nuestra fe. Nunca diga que no puede creer, porque si quiere creer, lo puede hacer. Pero no trate de creer por sí mismo, porque cuanto más trate de hacerlo, menos fe tendrá. Simplemente diga: “Oh Señor Jesús, te amo … Eres tan bueno”. Si hace esto, tendrá fe inmediatamente. Nosotros creemos en Jesucristo por Su fe, y por esta fe y para esta fe se revela la justicia de Dios a todo aquel que cree.
Conforme a nuestra experiencia, no fue que Dios nos aprobó primero, sino que nosotros lo aprobamos a Él [Ro. 3:4] … Nosotros éramos rebeldes y decíamos: “No me agrada Dios, Dios no es justo”. Todos pensamos de esta manera antes de ser salvos. Muchas personas hablan en contra de Dios diciendo: “Si Dios es recto, ¿por qué hay tantos pobres en el mundo? Si Dios es recto, ¿por qué entre las naciones no hay equidad?”. Admiten que Dios existe, pero argumentan que Él no es justo … Dios ha sido muy paciente con nosotros, haciendo muchas cosas por nosotros hasta que finalmente nos convenció de Su justicia. ¿Quién justificó primero a quién? Nosotros justificamos a Dios primero. Cuando fuimos convencidos por Dios acerca de Su justicia, lo justificamos y aun lloramos de arrepentimiento, diciendo: “Dios, perdóname. Soy tan pecaminoso e impuro. Necesito Tu perdón”.
Dios nos justificó gratuitamente por Su gracia, mediante la redención que es en Cristo y la fe de Jesús (vs. 24, 26). Ya que Cristo pagó el precio por nuestros pecados y realizó la plena redención para satisfacer todos los requisitos de Dios, Dios, a fin de ser justo, tiene que justificarnos. En cuanto a Dios, la justificación se realiza por medio de Su justicia; en cuanto a nosotros, la justificación es gratuita por Su gracia, en comparación con una justificación por las obras de la ley. Para ser justificados por las obras de la ley, necesitamos laborar, pero para ser justificados por la redención que es en Cristo, no hay ninguna necesidad de laborar, pues nos es dada gratuitamente por Su gracia. Nosotros no la merecemos; pero Dios está obligado por Su justicia a justificarnos por causa de la redención efectuada por Cristo, la cual satisface todos Sus requisitos. (Estudio-vida de Romanos, págs. 59-60, 62, 64)
Lectura adicional: Estudio-vida de Romanos, mensaje 5